Versión de El Rengo

Amigo de la infancia: "Cuando éramos pibes se trepaba a todos lados: a los árboles, a los edificios… Una vez, no me voy a olvidar nunca, estábamos jugando un picado en el Parque Saavedra, y yo no voy y mando la pelota arriba de un Eucaliptus altísimo, bien arriba. Nada más que al Arañita se le podía ocurrir ir a buscar esa pelota, como doscientos metros subió, iba pegado al tronco, como si tuviera pegamento en las manos, desde abajo lo aplaudíamos, se lo veía chiquito allá arriba parecía una paloma.”